fuji, @vyseal

A mi de verdad me encanta la repostería. Admiro profundamente a quienes se dedican a ella y todo el esfuerzo y dedicación que ponen en cada detalle de sus creaciones. Cada pastel y cada dulce refleja no solo sabor, sino también el inmenso amor que le tienen a su trabajo.

Existe algo realmente irónico en las personas que imponen estándares que ellas mismas no cumplen. Piden apoyo, pero no sostienen, piden constancia, pero desaparecen. Al final, exigen de los demás lo que ni ellos mismos están dispuestos a dar.

Yo guardo absolutamente todo lo que me regalan. Para mí cada obsequio tiene un valor que va mucho más allá del objeto en sí, porque guarda el recuerdo del momento, de la persona que pensó en mí y de la intención detrás del gesto.

Soy ese tipo de persona que cada vez que se encuentra con un gatito, realmente no puede evitar acariciarlo, tomarlo en brazos y arrullarlo. Es un impulso que va mucho más allá de mi autocontrol, una mezcla de ternura y adoración que simplemente me domina.

Me gustan muchísimo las plantas. Disfruto atenderlas, ver cómo crecen y mantenerlas siempre bonitas. Cada una tiene su propio ritmo, y eso hace que el acto de cuidarlas sea casi terapéutico. Además, logran darle a cualquier espacio un toque hogareño, cálido y lleno de vida.

Mi mayor problema es que muchas veces dudo de mis propias capacidades y esa inseguridad me frena. Me detengo y postergo cosas que sé que puedo lograr. Quiero aprender a confiar más en mí mismo y en mis decisiones, sin estar cuestionándome a cada instante.

« Mis afectos y deseos no han cambiado, pero una palabra suya me silenciará para siempre. Si sus sentimientos hubiesen cambiado tendría que decirle que me ha hechizado en cuerpo y alma, y la amo, la amo, no quiero estar sin usted otro día. » ⭒ Pride and prejudice / 2005.

Me encanta esa transición sutil entre el invierno y la primavera. Cuando el frío ya comienza a suavizarse, el paisaje cambia de tonos grises a colores vivos y las primeras flores comienzan a aparecer. Definitivamente, mi momento favorito del año.

La tranquilidad que me invade cuando llega la noche y puedo darme un par de horas para mí mismo es inmensa. De verdad que soy tan feliz cuando se acaba el ruido y finalmente puedo sentarme con mi taza de café a organizar mi calendario.

Septiembre finalmente ha comenzado y mi mayor anhelo es que esté repleto de momentos gratos y oportunidades valiosas, que sea un mes de cambios y de metas alcanzadas. Septiembre, bríndame todo lo que necesito y [por favor] más de lo que espero.

Un dato [innecesario] respecto a mi persona, es que mi nombre real no es el que traigo puesto, ese es solamente un diminutivo que me gusta como se lee y que además hace referencia al famoso monte de Japón. Realmente me llamo “fujitaro”, es cortito pero simple.

𖠁 ༉.

[ La mayoría de las personas se enamoran por primera vez en la adolescencia. Supongo que soy tardío o tal vez soy demasiado exigente. Sin embargo, el treinta de mayo de 1995 finalmente me enamoré por primera vez. ] ⭒ Fallen angels, Wong Kar-wai.

Detesto los números impares, de verdad no puedo evitarlo. Cada vez que me aparecen en algún tweet me veo en la [inmensa] necesidad de modificarlo y convertirlo en un número par. Sí, es una tontería, pero solo así me quedo tranquilo.

El último álbum de The Marías [submarine] realmente no tiene comparación alguna, es una joyita en todo sentido. Fácilmente podría tenerlo en repetición todo el santo día y aún así lo seguiría disfrutando como la primera vez que lo escuché.

Uno de mis tipos de vínculos favoritos [sin ninguna duda] es donde podemos estar solos pero juntos. Compartimos el mismo espacio pero hacemos cosas totalmente diferentes y simplemente disfrutamos de la calidez que la compañía del otro nos brinda.

𖠁 ༉.

Mi apodo favorito dentro de una relación [sin ninguna duda] es “amor”. Es una palabra tan simple y al mismo tiempo tan cálida. Y sí, puede que existan mil apodos aún más creativos, sin embargo, ninguno me hace sentir tanto como ese.

Mi gusto por las velas aromáticas es [realmente] inmenso. Cada vez que tengo la oportunidad de pasar por alguna tienda, termino llevándome mínimo una. Lo irónico es que a veces ni siquiera me gusta prenderlas, prefiero dejarlas como decoración por lo bonitas que son.

Mi peor tentación son los famosos “gastos hormiga”, realmente. De alguna u otra forma intento engañarme haciéndome creer que uno es ninguno, sin embargo, cuando se me acumulan los mini gastos de todos los días termina siendo casi todo mi dinero. No puedo.